jueves, 10 de febrero de 2011

Esperando la respuesta de ella- Miguel Dorelo


Esperando la respuesta de ella- Miguel Dorelo

El lunes a la noche la encaré por el Messenger.
Dejáme que lo piense, me dijo en el chat el martes a la tarde.
Por la noche me mandó un sms por el celular: Estuve todo el día pensando en vos y en tu propuesta. Beso.
El miércoles tenía un mensaje en mi correo: mañana me decido y te contesto.
El jueves eligió Facebook para decirme que si te digo que sí seguro que después voy a sufrir un montón.
El viernes, muy temprano recibí su estoy muy confundida y no sé si estoy preparada para una nueva relación.
Ese mismo viernes por la noche se inclinó por un mensaje directo en Twitter: me gustás mucho. Demasiado. Creo que puede ser un si, pero aún no estoy segura.
El sábado no tuve ninguna noticia de ella y me preocupé.
El domingo me explicó que estuve todo el día pensando en nosotros dos y al fin tomé una decisión: creo que lo voy a pensar un poco más, estas no son cosas que se deban tomar a la ligera.

Hoy es lunes nuevamente. Desde anoche estoy mucho más tranquilo; le mandé un último mensaje: “admiro tu poder de decisión, vos si que sabés lo que querés” y después la bloqueé en el Facebook, cerré mi cuenta de Twitter y abrí otra con un seudónimo, la di de baja de mis contactos del Messenger, marqué como spam su dirección de correo y hoy a la tarde cambio mi número de celular.
No hay nada que me reviente más que una mujer indecisa.

Elaborado para La Cuentoteca

4 comentarios:

A.R.N. dijo...

encarar en el msn? nooo. que le robe un beso, es mas romantico.
gracioso tu relato.
beso

Salemo dijo...

Es que no sabía.¿El Messenger sirve para alguna otra cosa? Las cosas de las que uno se entera. Entonces voy a hacer algo distinto la próxima vez que me conecte.
En serio, aclaro que ni lo uso y el relato es pura ficción; no conozco mujeres tan indecisas, por lo general me contestan enseguida. Y casi siempre que NO.
Beso.

Analía dijo...

Cuàntas vueltas para decidirse!... Me gustó. Beso.

katherin dijo...

Dejame pensar en una opinión,